domingo, 13 de mayo de 2012

Cupcakes choco-choco para el día de la madre



Estos cupcakes acompañaron a un tiramisú el domingo pasado en la comida que hicimos en la casa del pueblo para celebrar el día de la madre. Como éramos unos cuantos opté por llevar dos postres y no fue mala idea, así hubo para todos los gustos. Además, como entre todos los comensales había cuatro que éramos mamás, cuatro de los cupcakes llevaron una rosa roja a modo de decoración sobre el frosting que había preparado. Gustaron mucho, tanto a las mamás como a todos los demás que no celebraban su día.

La receta del cake está basada en los "chocolate cupcakes" del pequeño libro de la Hummingbird Bakery, una joyita a la recurro muchas veces y que os recomiendo especialmente. Tiene unas variaciones en las cantidades de los ingredientes y la forma de preparación, pero la esencia parte de esta receta. Es un cake muy jugoso y rico que sirve también para layers, no dejéis de probarlo.

INGREDIENTES (para 12 cupcakes)

70 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
100 gramos de azúcar
1 huevo
1/2 cucharadita de extracto de vainilla
100 gramos de harina
20 gramos de cacao en polvo sin azúcar (Valor)
1 cucharadita y media de levadura
1 pizca de sal
120 mililitros de leche

Virutas o trocitos de chocolate blanco (opcional)



PREPARACIÓN

Precalentamos el horno a 175º C y colocamos las cápsulas de los cupcakes en el molde. En Kitchen Aid o en cualquier otro robot o batidora de varillas ponemos la mantequilla con el azúcar y batimos a velocidad media hasta que la mezcla comience a blanquear y quede bien integrada. Añadimos el huevo y seguimos batiendo. Lo mismo con el extracto de vainilla.

En un bol tamizamos la harina junto con el cacao y añadimos la levadura y la sal. Mezclamos bien y empezamos a agregar esta mezcla de ingredientes secos a la mezcla anterior de mantequilla, azúcar y huevo. Alternamos un poco de la mezcla de harina con la leche hasta terminar de agregar todos los ingredientes.

Una vez integrado todo pasamos a repartir la mezcla en las cápsulas. Colocamos una cucharada en la base de la cápsula y ponemos (si queremos que el cupcake tenga sorpresa en forma de chocolate blanco) unas virutas o trocitos de chocolate blanco. En mi caso, se me ocurrió la brillante idea de colocar un Candy Melt, pero no os lo recomiendo ya que pesa mucho y al hornear se baja al fondo de la cápsula, así que mucho mejor trocitos pequeños o virutas que queden integradas en la masa. Cubrimos las virutas o trocitos con otra cucharada de mezcla y horneamos unos 20-25 minutos, ya sabéis, dependiendo de cada horno.



Al sacar del horno dejamos unos cinco minutos dentro del molde y luego ya retiramos los cupcakes y los dejamos enfriar sobre una rejilla.

Para el frosting recurrí de nuevo al Swiss Meringue Buttercream de chocolate blanco que tanto les había gustado en el layer cake de mi cumpleaños. Añadí un poco más de chocolate y quedó muy rico y nada empalagoso, ¡hasta mi cuñada se lo comió a cucharadas!

La receta la tenéis en el post anterior, el del layer de dos chocolates, aunque eché 200 gramos de chocolate blanco en vez de 150. Utilicé de nuevo las claras deshidratadas porque quedan unos merengues muy firmes y aguantan bien el calor que empieza a hacer.



Las rosas de los cupcakes para las mamás están hechas con fondant Sodifer de color rojo. En este caso, en vez de formar los pétalos con bolitas de fondant utilicé un cortador para rosas y calas de Städter que es estupendo para estos trabajos, se consiguen unas flores divinas. Os dejo una foto, aunque es del teléfono, pero para que veáis cómo son.



Espero que os hayan gustado :-)


domingo, 6 de mayo de 2012

Layer Cake dos chocolates



¡Ainsss! Que se me pasó marzo, y abril... y ¡llegó mayo! Se me pasan los días, las semanas y los meses que no me doy ni cuenta, mis niños crecen y yo... pues me hago vieja, ya 32 que cayeron hace unos días. Así que tocaba celebrarlo y hacer tarta. En mi casa les apetecía algo... ya sabéis, como dicen ellos, fácil de comer, una tarta mousse, o alguna de queso, o de limón fresquita... pero yo tenía antojo de chocolate, y eso que no soy muy chocolatera, vamos, que me pones unas fresas y una tableta de chocolate y sin duda escojo fresas. Pero es que llevo unas semanas que me ha dado por el chocolate, así que, como la cumpleañera manda, pues hice lo que me apetecía, layer cake de dos chocolates. Para el bizcocho estuve un buen rato mirando recetas, blogs y libros, para terminar haciendo una "versión libre" del bizcocho de la tarta Selva Negra, como me suele pasar, menos mal que esta vez salió bien (que aún recuerdo mis últimos cupcakes tuneando una receta ¡qué desastre!). Y para el frosting hice una swiss meringue buttercream a mi manera, con chocolate blanco, receta made in mi casa, que curiosamente, también estaba muy rica, así que la he repetido hoy en unos cupcakes.

Sin más lío... vamos a la receta:

INGREDIENTES

100 gramos de harina
50 gramos de cacao en polvo (usé Valor)
2 cucharaditas de levadura
1 cucharadita de azúcar avainillado
1 pizca de sal
3 huevos
150 gramos de azúcar
100 gramos de mantequilla
50 gramos de nueces picadas
75 gramos de leche



PREPARACIÓN

Precalentamos el horno a 180º C y pulverizamos tres moldes para layer (o uno de bizcocho normal, aunque luego habrá que cortar las capas) con spray desmoldante o enharinamos, al gusto.

En Thermomix (aunque se puede hacer al modo tradicional, tiramos de varillas y tardamos un poco más, pero el resultado es el mismo) ponemos en el vaso bien seco la harina, el cacao, la levadura, el azúcar avainillado y la sal. Programamos 20 segundos velocidad progresiva 5-10 y así queda todo mezclado y como pasado por el tamiz. Pasamos a un cuenco y reservamos.

Ponemos la mariposa y echamos los huevos y el azúcar. Programamos 5 minutos, 37º C  velocidad 3 1/2 y al terminar programamos el mismo tiempo y velocidad pero sin temperatura. Añadimos después la mantequilla en dados a temperatura ambiente y mezclamos unos segundos en velocidad 3, hasta que veamos que se ha integrado en la masa. Añadimos ahora la mezcla de harina-cacao, las nueces picadas y la leche y mezclamos unos pocos segundos en velocidad 3. Terminamos de mezclar con la espátula y repartimos en los tres moldes.

Horneamos unos 20-25 minutos (dependerá de cada horno) y desmoldamos sobre una rejilla para que los bizcochos se enfríen. Mientras, preparamos el frosting...



SWISS MERINGUE BUTTERCREAM DE CHOCOLATE BLANCO

150 gramos de clara de huevo
220 gramos de azúcar
280 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
150 gramos de chocolate blanco

Me pasó que no tenía claras pasteurizadas de las que suelo comprar en Mercadona y me daba mucha pereza usar huevos y dejar yemas "desparejadas", así que usé clara deshidratada, que suelo tener en casa para hacer la glasa. Usando 6 gramos de clara y 30 gramos de agua se consigue el equivalente a una clara de huevo. Sólo hay que batirlo hasta que el polvo se disuelve y luego usarlo normal, como haríamos con las claras de huevo.

Una vez preparada la mezcla, la paso al vaso de la Thermomix, me gusta hacer así el merengue suizo para no preocuparme de la temperatura, aunque también se puede hacer al baño maría, controlando que no se cuajen las claras.

En Thermomix ponemos la mariposa, echamos las claras y el azúcar y programamos un minuto por cada clara, 50º C velocidad 3 1/2. Una vez acabado, programamos el mismo tiempo y velocidad sin poner temperatura. A partir de este punto yo sigo en Kitchen Aid. Paso el merengue al vaso de la KA y lo monto bien firme. Mientras se monta se va enfriando y al terminar ya puedo ir agregando la mantequilla cortada en dados. También mientras se monta el merengue deshago el chocolate en el microondas y lo dejo enfriar un poco para añadir al frosting cuando ya se ha terminado de integrar la mantequilla. Sólo queda batir unos minutos más y nos quedará un swiss meringue buttercream delicioso y con una textura ideal.

Ahora queda montar la tarta, sencillo: bizcocho, capa de frosting, bizcocho, capa de frosting y bizcocho. Terminamos cubriendo con una buena capa de frosting y decorando con lo que más nos guste, en mi caso crocanti de almendras.



Y bueno, a pesar de no haber hecho caso a la familia, resulta que les gustó, así que... prueba del layer doble chocolate... ¡superada!